Capitulo 8.

-¿Que pasa?- volvió a repetir.
-Todavía no me presentaste a tu primo.-
-Pensé que era algo grave.-
-Lo es, para mi. ¿Cuando me lo presentaras?- insistió.
-Si quieres mañana, en el parque.-
-Esta bien.- sonrió.

Yo baje y me encontré con Sol y Marcos hablando. Me acerque y lo salude. Estaba vestido normal, con una camisa y un desodorante que se sentía a kilómetros. Amaba ese olor. Lo invite a que nos vallamos y el accedió, obviamente. Salimos de mi casa y Sol cerro la puerta tras nosotros.

-Estas hermosa.- sonrió.
-Gracias. Vos también.-
-Solo me bañe.- se rió.- creo que ya me hacia falta. Dame la mano.- dijo y me la tomo mientras empezábamos a caminar.
-¿A donde vamos?-
-A se felices, no mentira a comer helado.-
-No me gusta el helado.- bromee, pero el no se dio cuenta.
-¿No te gusta?- pregunto asombrado.
-Si me gusta.- sonreí.
-haha, esta bien. Queda acá a la vuelta.-
-No puede ser, tengo una heladería a la vuelta de mi casa y no lo sabía.-

Él rió aunque lo que dije no daba mucha risa. Nuestras manos seguían juntas, como si fuéramos mas que amigos, pero no me importó, ya que, lo crean o no, yo quería ser mas que eso, ser mas que una amiga.
No dijimos nada importante hasta que llegamos a la heladería, cuando estábamos ahí él pidió por mi y nos sentamos en unas mesas que estaban afuera.

-¿De que gusto pediste?- pregunte para empezar la conversación.-
-No se como se llama, pero amo este gusto.- reí junto a él.
-No puedes no saber que gusto es. ¿Que le dijiste a la chica cuando te pregunto?-
-Es que vengo acá siempre, y siempre pido el mismo gusto. La chica me miro y ni siquiera me pregunto que gusto quería.- sonrió.
-¿No te cansas?- pregunte comiendo el helado.
-¿De que?-
-De pedir siempre lo mismo.-
-No me canso de pedir lo mismo, como no me canso de mirar tus ojos.- dijo y me penetro con la mirada.

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Es coto, ya se. Pero tenia escrito este pedazo y lo quería subir.
Mañana sigo.
Gracias por leer ;)